LA MENTIROSA ( CUENTO )

                  

 Un pescador de truchas
que pescaba siempre a trompicones,
un día tuvo suerte
y pescó tres, grandes como salmones.
Se felicitó a sí mismo
y para celebrarlo
se las llevó a su mujer,
que alegre se puso a cocinarlas
después de aliñarlas muy bien.
El hombre propuso al  buen cura invitar
para el manjar compartir,
ella estuvo de acuerdo
y  a por él, fue el hombre feliz.
Mientras ellos llegaban
ella empezó a pellizcar la suya,
y de la trucha a la boca
se comió hasta la del cura.
Y cuando  al fin llegaron
se sentaron a la mesa,
y ante la ausencia de las truchas
le  preguntan por ellas.
Cuando el marido afilaba el cuchillo,
ella le dijo al cura al oído:
¡Mi hombre, las orejas le quiere cortar!
y el cura corría calle abajo
sin volver la vista atrás.
Ante la huida del pobre cura
ella la  aprovechó con maldad,
¡él se ha comido las truchas
no le dejes escapar!
Y  corriendo detrás de él
el marido le decía:
¡Por favor,  señor cura,
déjeme por lo menos una!
¡ni media ni una ni dos
el cura le respondía:
estas orejas que quieres cortar
                                               son mías, solo mías!